El Nacional soportó jugar con una pizarra para anotar la puntuación ante el desperfecto eléctrico en el tablero principal, para quedarse con el triunfo sobre 9 de Julio 74 a 57 en la finalización de los hexagonales clasificatorios. Juan Pablo Morán (18, 6/9 T2), Nicolás Quiroga (11, 5/7 T2) y Fernando Larrañaga (11) fueron los máximos anotadores del elenco ganador; mientras que por el visitante sobresalieron Gonzalo Badano (16) y Gonzalo Spikerman (15).
Luego de algunos problemas con el tablero electrónico (ver aparte), el desarrollo comenzó con buen ritmo y mucha solidez. Garbarino (4 y 5 rebotes) impuso su talla cerca del cesto para dominar en la pintura y Morán (6) demostró el por qué de la intención de Olimpo de sumarlo al plantel que disputará el Federal. Aunque la defensa de 9 de Julio mejoró (5 pérdidas del local) y al trabajó de Zárate (6 y 2 tapas) en los tableros se sumaron la mano de Badano (8) y los rompimientos de Spikerman (5). Así fue que el visitante cerró mejor el chico y terminó al frente por cinco (21-16).
La dupla Badano-Spikerman (combinaron 13) marcaron la tendencia y dinámica del “9” en el trámite del segundo chico; pero el ingreso de Quiroga (10, 4/5 T2) le dio mayor peso debajo del aro a El Nacional y más espacios para el lanzamiento de Morán (2/3 T3), emparejando el marcador y transformando el encuentro de gol por gol. No obstante una seguidilla de triples del visitante (4/8 T3) le terminó dando la mínima ventaja al cabo de la primera mitad.
A la vuelta del vestuario el partido entró en una meseta, donde ambos equipos cedieron el balón (10 pérdidas entre ambos) y tiraron mal de cancha, a tal punto que pasados los primeros cinco minutos habían convertido solamente 8 puntos. Sin embargo Hoffmann (8 seguidos) le otorgó el cambio necesario en cuanto a actitud, lo que conllevó mayor energía, para que el “celeste” estampe un parcial de 10-0 y se aleje en el marcador merced a una buena circulación del balón, la cual terminaba en una conversión de tres puntos (5/8 T3). Los 5 puntos que anotó el visitante evidenció la ausencia del aporte de Badano (0/8 TC en segundo tiempo) en el goleo.
Spikerman (5) tomó la posta en la ofensiva de 9 de Julio para intentar meterse en juego; aunque el equipo careció de fluidez, cediendo constantemente ante la intensidad defensiva del dueño de casa y tomando tiros muy forzados. Y con la experiencia de Larrañaga (6, 3/3 T2) y la fortaleza de Garbarino (5) El Nacional hilvanó una nueva racha de 7-0 para tomar la máxima ventaja en el encuentro (66-50) y terminar controlando el desarrollo hasta el final, asegurándose el triunfo.
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Síntesis:
El Nacional (74): Juan Pablo Morán 18, Emiliano Iraola 9, Nicolás Vera 2, Facundo Martínez 2 y Pomar Garbarino 9 (F.I.); Fernando Larrañaga 11, Facundo Sevillano 2, Francisco Hoffmann 8, Nicolás Quiroga 12 y Braian Alonso 1. DT: Juan García.
9 de Julio (57): Fernando Peñalver 0 (x), Gonzalo Badano 16, Gonzalo Spikerman 15, Martín Villoldo 8 y Alexis Zárate 12 (F.I.); Alexis Ortiz de Rosas 0, Juan Ignacio Blasco 0, Milton Ruesga 4, F Borelli 0 y Federico Escobar 2. DT: Emiliano Roldán.
Parciales: 16-21, 38-39 (22-18), 57-44 (19-5) y 74-57 (17-13).
Árbitros: Miguel Firpo y Alejandro Goñi.
Estadio: “Hermano Ciccioli”.
De no creer
A pesar que se había consultado por el estado del tablero electrónico, al momento de arribar al “Hermnos Ciccioli” se comunicó que el mismo se había reparado por la mañana pero que no funcionaba y que naturalmente se debía llevar la cuenta del tiempo y el registro de puntos de manera manual.
Lo sorprendente fue la pizarra, con fibrón y borrador como combo, que acercaron a la mesa de control para poder controlar la puntuación de cada equipo; mientras que el tiempo fue seguido mediante un celular.
Por suerte los técnicos continuaron trabajando para solucionar el desperfecto eléctrico y a partir del segundo cuarto el encuentro pudo desarrollarse correctamente.
¿Mano de piedra?
Más allá del humor que el propio jugador le otorga a la lesión, Agustín Dottori no pudo ser de la partida en el encuentro de anoche dado que presentó una evidente inflamación en su mano derecha.
«Contra Estudiantes caí sobre la mano y me dolía bastante, lo que no pude ni entrenar. Contra Pueyrredón jugué porque teníamos chances de entrar a la A1 pero el dolor la verdad que molestar. Me realicé una placa en la que no se ve lesión osea así que mañana veremos que me dice el médico», explicó el propio Dottori.
