El Señor de los Talentos fue presentado en Bahía Blanca, la ciudad de Ginóbili. Allí se dio la charla Deporte y Superación y dos disertantes de lujo acompañaron al autor: Alejandro Montecchia y Bere Stortoni (ex Puma).
«Estábamos en Calabria cuando, un domingo, a Manu se le ocurrió ir a tirar al aro. El intendente del estadio no podía creerlo y le pidió que se fuera a descansar. Pero él insistió y si bien no logró que se le abrieran la cancha, dejó claro cuál era su nivel de profesionalismo». Así, con una de las varias anécdotas que contó durante los 70 minutos que duró el evento, Alejandro Montecchia describió a su amigo, Emanuel Ginóbili.
El Puma, campeón olímpico, fue uno de los tres disertantes que tuvo la 2ª presentación del libro El Señor de los Talentos, esta vez en Bahía Blanca, la ciudad del astro, que tuvo la presencia de Leandro, uno de sus hermanos. «No es casualidad que el mejor basquetbolista de la historia haya salido de esa casa, de esa familia, de ese barrio, de ese club y de esta ciudad», enfatizó Julián Mozo, el autor de la obra, quien ahora mudará el evento a Monte Hermoso (sábado 4).
Otro de los protagonistas fue Bernardo Stortoni, ex integrante de Los Pumas y uno de los hijos dilectos de la ciudad. Dentro de la charla Deporte y Superación que se desarrolló durante la reunión, Bere aportó su visión desde la experiencia en el rugby y el deporte social, ahora que es subsecretario de deportes de Bahía. «Recuerdo que, en un viaje a Nueva Zelanda para un test contra los All Blacks, nos mandaron a un hotel flojo, todos separados, a entrenarnos a un club lejano… Todo tipo de adversidades que nos habían puesto de malhumor. Pero cuando entrenamos al estadio para practicar, el Tano Loffreda, nuestro coach, salió corriendo y se tiró, todo vestido, en un charco lleno de barro. Y dijo ‘qué lindo es jugar al rugby acá, con esta condiciones…’. Era su forma de liderar: nos demostraba que éramos afortunados y que debíamos superar las dificultades», explicó Bere en referencia a uno de los valores que se tocaron en el auditorio de la empresa Codimat.
Además de liderazgo, se desmenuzaron otros cinco intangibles esenciales para triunfar en el deporte: la importancia de la mentalidad, el profesionalismo, los sacrificios, el dominio del ego y la educación y el club.
«Fue un placer, un privilegio… Son charlas necesarias, que dejan un mensaje, un ejemplo o una motivación», analizó Stortoni. Cada uno de los temas comenzó en Manu y derivó en otros ejemplos. Stortoni hizo hincapié en la cultura de club («Te contiene, te da valores y códigos», dijo) y admitió cómo hizo el click como profesional. «Fue una noche que estaba en una disco, con un trago en la mano y un entrenador me pidió que me cuidara y comencé a prepararme para algo grande. Hice una pretemporada, dio un salto de calidad y me empezaron a llamar de todos los seleccionados», contó quien fue ídolo en Escocia tras brillar en el Grasgow Warriors.
Así, entre historias, opiniones y relatos, transcurrió la noche. Una más para conocer los secretos de un número 1.
Fuente: Julián Mozo.
Foto: Imagen Bahía.