Con un triple de Fernández en la última bola, San Lorenzo venció como visitante a Liniers por 88 a 87 en un partido increíble. El Naranja jugó casi 22 minutos de manual y sacó 22 de luz (56-34), pero el Chivo respondió con un parcial de 19-0 que lo devolvió al juego. De allí en más fueron palo a palo al cierre –con polémica en la planilla incluida-, dejando a los de Canosa dos abajo con 14.3s por jugar. Allí apareció el base con una bomba sobre la chicharra que desató el festejo de Sanlo. Lucho (25, 4/7 T3, 4/7 T2, 5/6 T1, 11 en el 4C) fue la bandera de un equipo que contó con buenas actuaciones de Ríos Lodoli (17, 7/8 T2), Benedetti (14, 10/14 T1, 9 en el 1C, 8 reb, 6 as) y Silva (14). Por el dueño de casa, que pagó caro sus 18 pérdidas (14 en el PT), no alcanzó con lo hecho por G. Martínez (30, 11/18 TC), Pizzo (14, 3/5 T3, 11 recobres), Goenaga (14) y Torre (10+8+8).
Fue el visitante el que entró mejor al partido, con Benedetti (5, 5/6 T1) mostrándose muy agresivo a la hora de atacar el aro y ganarse los puntos desde la línea, el Naranja sacó rápidas ventajas (7-0 a 8.21), pero Liniers respondió, tras entrar frío (0/2 TC y 2 pérdidas), encontró gol gracias a las penetraciones de G. Martínez más un triple de Pizzo, para establecer un parcial de 11-2 que lo dejó adelante (11-9 a 5.15) a mediados del período. El pasaje final se tornó sumamente parejo (empates en 11, 13, 15, 17 y 19), G. Martínez (cerró con 8) siguió sumando mientras que los internos comenzaron a aportar cerca desde cesto –Goenaga 4, Starc 2- en Chivo que estaba bien para con el aro, pero las pérdidas (5) eran un problema que San Lorenzo aprovechó para cerrar mejor, porque Benedetti (terminó con 9, 7/8 T1) siguió siendo el abanderado ofensivo, Ríos Lodoli (4) y Silva (4) fueron efectivos y Fernández (4) condujo de buena manera para que los de Canosa se lleven el primer cuarto 23 a 19.
Tras un par de bombas de Pizzo y G. Martínez que parecían mantener con vida al dueño de casa (25-26), Liniers cayó en un pozo cometiendo los mismo errores que en el período anterior, las pérdidas (7) hicieron que casi no pueda tomar lanzamientos al cesto y solo sume 2 puntos en más de 4 minutos, y el visitante lo maximizó, con Halberg (3 + 5 robos) capitalizando cada situación y dando fluidez a los ataques, sumó mediante Ríos Lodoli (5) y Diez (4) castigando de media distancia, para marcar una racha de 15 a 2 que le dio luz de 14 (41-27 a 3.32). Mediante otro acierto lejano de Pizzo más el juego que creó Torre (3 asistencias), el dueño de casa volvió a recomponerse pero los errores se siguieron sucediendo (fueron 9 pérdidas en el 2C) y el visitante no frenó su marcha, Ríos Lodoli fue el más claro y Fernández cerró con un triple que le dio una buena ventaja al visitante camino a los vestuarios: 47-34.
La historia pareció no cambiar tras el descanso largo, el Chivo siguió impreciso (tres ataques sin sumar) y los de Canosa siguieron machacando (4/4 TC), Morando (4) fue para adentro, Fernández sumó nuevamente de larga distancia y Silva también se anotaba para decorar un 9-0 que estiro la máxima a 22 (56-34) a falta de 8.29. Pero tras ese inicio de cuarto perfecto, San Lorenzo se quedó en ofensiva, estuvo casi 4 minutos sin sumar (T1 de Benedetti) y tardó más de 6 en sumar un gol de campo, perdiendo juego de pases y puntería (0/3 T3, 0/6 T2, 1/2 T1, 2 pérdidas), lo que Liniers aprovechó al máximo para volver a meterse en juego, cuidando el balón, adueñándose del trámite y disfrutando de un pasaje extraordinario de G. Martínez (11) que conseguía puntos de todos los colores, estableció un parcial de 19 a 0 que lo dejó a 3 (56-53). Aunque G. Martínez (terminó con 13) fue una gotera y Goenaga se adueño de la pintura, fue San Lorenzo el que reaccionó, con una ráfaga de Ríos Lodoli (4) logro recuperar la sonrisa en ataque y llegó al cuarto final ganando 65 a 57.
Pero los de Canosa iban a sufrir en el arranque del último cuarto, porque no solo perdió efectividad (1/4 TC, T3 de Halberg), sino que falló en el balance defensivo y le permitió correr al local, con G. Martínez y Torre comandando al equipo, más el aporte de Pizzo y la aparición con un triple de M. Martínez (primeros puntos), el Chivo pasó al frente (69-68). Tras un momento de discusión en la mesa de control (ver aparte), el partido continuó su marcha y la paridad se hizo presente en el Sagasti; Torre (6) jugó e hizo jugar al dueño de casa, pero Morando y Fernández mantenían con vida a la ofensiva Naranja que dejaba las cosas igualadas (78-78) a falta de 3.15.
Allí, como en el boxeo, se dio un juego de golpe por golpe, M. Martínez (sus 9 en el 4C) anotaba una bomba, pero Fernández respondía de la misma manera (81-81 a 1.17). El propio base visitante sumaba con dos libres, aunque Starc rápidamente conseguía un 2+1 que dejaba al albinegro arriba (84-83 a 37.1). Un doble largo de Silva le daba la ventaja a los de Canosa pero fue G. Martínez el que sumó de larga distancia dejando a Liniers al frente (87-85) con tan solo 14.3 segundos por jugar en un partido tan dramático como entretenido. En la última posesión de la noche, Ríos Lodoli recibió, y tras un intento de penetración, encontró a Fernández a 45º, Lucho tomó el triple, el balón bailó por el aro e ingresó desatando la locura de un San Lorenzo que se llevó un triunfazo de la casa del campeón.
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Síntesis | Primera División – Oficial – Fecha #16
Liniers 87: Santiago Torre 10, Gonzalo Martínez 30, Mariano Pizzo 14, Fabricio Starc 8, Facundo Goenaga 14 (FI); Matías Martínez 9, Iván Petrini 2, Julián Marinsalta 0. DT: Sebastián Aleksoski.
San Lorenzo 88: Luciano Fernández 25, Esteban Benedetti 14, Mariano Morando 9, Martín Ríos Lodoli 17, Leandro Silva 12 (FI); Nahuel Diez 4, Federico Biggi 0, Mauricio Halberg 7. DT: Rafael Canosa.
Parciales: 19-23, 34-47 (15-24), 57-65 (23-18), 87-88 (30-23).
Árbitros: Emanuel Sánchez – Sebastián Giannino.
Estadio: Hernán Sagasti (Liniers).
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Un problema valor doble
A falta de 6.33 para finalizar el último cuarto, se dio una situación confusa en el Sagasti. En plena racha local, el juego se tuvo que detener por problemas en la mesa de control. Mientras que el tablero indicaba 71-68, la planilla decía 69-68 para Liniers. Tras discusiones y reclamos, los jueces decidieron continuar el juego con lo que decía la hoja.
Nobleza obliga, la planilla de Gente de Básquet tenía ventaja de 3 a favor del Chivo.
