Luego de la conformación del plantel de Segunda División y de encontrarse con nuevo formato de armado del mismo, el técnico Miguel Loffredo dio su parecer sobre como impactará en La Falda tanto en el equipo superior como en las categorías formativas. Además, el Colo comentó los proyectos que tienen al haber formado un plantel competitivo y las metas que tiene la incansable dirigencia de la institución.
¿Qué objetivos tienen para este año?
El primer objetivo es volver a poner a La Falda en los primeros planos. Consideramos, junto con la dirigencia, que todo lo bueno que se está haciendo en infraestructura y los trabajos en general va de la mano con los resultados de la Segunda División, terminan reflejándose ahí. Creemos que el plantel superior es la vidriera, ya que es más atrayente para chicos, sponsors y sobre todo para la gente del barrio, que queremos que vuelva al club. Que el equipo esté bien para que todos se vuelvan a identificar con el club. La conformación de un equipo que pueda pelear arriba es parte de un objetivo, ya que con él intentaremos contagiar una identidad por la institución.
¿El nuevo formato de competencia de tener siente mayores y el resto menores abrirá las puertas para los chicos?
Es relativo que los chicos jueguen más o menos, depende de cada club y del material con el que cuente cada uno. Lo que genera este formato es que los chicos tengan una chanche de jugar algunos minutos más. Pero eso también depende de cada entrenador. Nosotros apostamos a un sub-21 para que sea el base del equipo, como lo es Julián Rodríguez. Hay quienes ven la diferencia en jugadores con o sin experiencia; en mi caso particular me fijo en si un jugador sabe jugar o no. Está claro que la experiencia hará que se equivoque menos en la cancha; pero eso con el trabajo se puede corregir.
La Falda viene trabajando duro en la formación de los chicos; ¿Cómo crees que impactará el hecho de tener un plantel competitivo como vidriera?
La idea es justamente esa, que sea la vidriera de una institución que se esfuerza mucho para crecer día a día. Esperemos poder ser protagonistas y que podamos crear identidad con el club. Que un chico que nos vea no dude entre quedarse o irse; sino que vea que se puede llegar a ese lugar de privilegio que es el plantel superior de cada club y se esfuerce para lograrlo. Básicamente es que el jugador sienta que su futuro puede estar en el plantel Superior. En el caso de La Falda; los veo muy bien a Minnucci y a Román, así que espero estén a la altura y puedan sumar minutos importantes para contribuir con el equipo y su crecimiento personal.
Si los chicos tuvieran que elegir venir a jugar a La Falda; ¿Por qué deberían elegirlo?
Uno que tuvo la suerte de trabajar en clubes importantes de Bahía; se ve que hay un club ordenado y que día a día lo proyecta en infraestructura. Actualmente se está trabajando en la instalación de un gimnasio, que será muy importante para el trabajo formativo. Se ven entrenadores comprometidos, gente con ganas de crecer. Si bien es una realidad que estamos chocando con un problema de espacio físico, que creo le pasa a todos los clubes; contar con material humano comprometido para el crecimiento institucional por un lado y personal por otro, en el caso de los chicos, donde se esfuerzan para enseñarles los fundamentos para jugar este deporte pero además inculcándoles valores esenciales para su vida social fuera de la institución. Uno de los proyectos que tiene la dirigencia es trabajar en una cancha alternativa que llevaría a crecer mucho más el básquet menor.