Liniers venció como visitante a Villa Mitre por 88-79 e igualó la serie de semifinales del Oficial de Primera. El Chivo arruinó una ventaja máxima de 24 puntos en la noche, concediendo al tricolor colocarse por debajo en el marcador por la mínima (65-66 a 6m). Pero gracias a la soberbia actuación de Gonzalo Martínez (23 puntos, 4-7 en t3, 3-3 en t2) logró salir a flote. En el local, no bastó con las buenas producciones de Marcelo Berdini (20, 4-9 en t3) y Ramiro Heinrich (16 y 10 rebotes). El jueves, en el Hernán Sagasti, irá el tercer y definitorio punto de la llave, cuyo ganador se medirá en las finales del tramo ante Bahiense (barrió la serie ante Alem).
Liniers desplegó temprano su juego, ante un muy buen marco de gente (algo que no es raro entre los dos equipos, pero quizá si más por la instancia en que se da el encuentro), con la batuta de Mauro Zalguizuri repartiendo juego y generando contragolpes (3 asistencias) Dottori atacando con decisión el aro (7, incluyendo también un triple), todo ello apoyado por la buena tarea defensiva de Juan Ignacio Bellozas bajo el aro, peleándole el rebote a Bollo y Heinrich, con éxito (4). Y la defensa fue una gran arista del chivo, porque con mucho trabajo de piernas en el perímetro, tanto en los cambios de marca como en los 1v1, Liniers le anuló el sistema ofensivo a Villa Mitre, que no le quedó otra que abollar el aro desde los 6,75 (0-8 en ese tramo), concediendo una importante ventaja a su rival (9-25).
Villa Mitre continuó sin hallar rédito ofensivo (0-11 en t3) y sólo podía ver como Liniers se escapaba en el marcador (32-17 promediando el 2C). Pero en ese momento se dio un quiebre en el encuentro: tras un cruce entre jugadores de ambos bandos tras una fuerte falta que Germán Andrés recibió penetrando al aro, Mauro Zalguizuri, por un aparentemente fuerte reproche a la terna arbitral, recibió doble falta técnica, lo que le significó su descalificación del encuentro. Liniers perdió algo de volumen de juego y el tricolor, con combinaciones de poste-alto-bajo entre Pineda-Heinrich-Bollo y Martínez (en el recambio) logró mermar diferencias (21-34). Pero de nuevo la defensa, en este momento gracias a la tarea de Julián Marinsalta (dos tapones) que supo capitalizar en el otro costado (3-3 en t2) le permitió al Chivo calmar la tormenta y cerrar arriba el primer tiempo de manera formidable (23-45).
Somos dos equipos muy parejos. Creo que tres de los partidos que jugamos en el año se definieron por un punto de diferencia. Y sabíamos que, ante su gente, iban a reaccionar. Nosotros nos perdimos un poco en ataque, pero en el momento clave supimos mantener la frialdad para cerrar el juego. Ellos (por Villa Mitre) nos metieron 5-6 triples al hilo, cosa que no es normal aunque sabemos que son un gran equipo tirador de tres. Pero en el momento en el que ellos mejor se sentían, con el empuje de la gente, nosotros nos aislamos y le dimos la vuelta al partido. [Sobre la cantidad reducida de minutos que le tocó este año y su gran noche ofensiva] Si bien es cierto que soy un jugador por sobre todo ofensivo, siempre trato de aportarle desde donde pueda al equipo. Hoy se me dio de tener muchos minutos, algo que quizá este año no me pasó tanto, pero los supe aprovechar al máximo (Gonzalo Martínez)
Sin un armador natural en cancha, Liniers no tuvo alternativa que recurrir al juego de aislamiento de Gonzalo Martínez. Y para su fortuna, el número 7 respondió, dado que tuvo un fenomenal segmento (12 puntos, 2-3 en t3 y 3-3 en t2). Villa Mitre obtuvo un par de respuestas en ataque, presionando en toda la cancha defensivamente, con Pineda encontrando el hueco en la pintura (7) y Marcelo Berdini intentando mejorar la imagen del tricolor detrás del perímetro (2-2) en el ataque. Si bien la ventaja continuó pareciendo decisiva para la visita (44-64 al cabo de 30 minutos), los triples de Berdini fueron una señal de cosas por delante…
Porque Liniers entró en un limbo y Villa Mitre volvió a la vida gracias a sus “Splash Brothers”: Andrés y Berdini. Con un ahora eficiente pasar desde larga distancia (4-4), generando juego en contragolpe (3 pérdidas de Liniers) y forzando al chivo malas decisiones en el aclarado, el local metió un contundente parcial de 21-2 en 7m del 4C para ponerse a tiro en el marcador (65-66). Pero ahí nomás, el blanquinegro puso freno a la escalada local. Y de nuevo, mucho tuvo que ver la calidad de Gonza Martínez jugando el 1v1, uno de los mejores en el básquet local en ese rubro. Un triple y dos viajes a la línea del ex Bahía Basket pusieron paños fríos al partido, y tras un par de pérdidas de Villa Mitre (más las salidas de Monteoliva y Renzi por quinta falta), Dottori se animó también a jugar el aclarado (4) para poner números definitivos a la noche. Lo que todavía resta por dirimir, el próximo jueves, es quien se las verá con Bahiense del Norte en las finales del Torneo Oficial. Finales que pueden declarar campeón al tricolor de calle Salta, o dar inicio a una larga serie entre dos equipos para definir quien se queda con la corona de Primera en 2016…
Síntesis| Torneo Oficial – Semifinales – Juego #2
Villa Mitre 79: Marcelo Berdini 20, Matías Monteoliva 2 (x), Nicolás Renzi 7 (x), Javier Bollo 8, Ramiro Heinrich 16 (FI); José Luis Martínez 2, Germán Andrés 15, David Pineda 9. DT: Ariel Ugolini.
Liniers 88: Mauro Zalguizuri 3 (D), Agustín Dottori 13 (x), Mariano Pizzo 8, Federico Radavero 16, Juan Ignacio Bellozas 9 (FI); Matías Martínez 12, Gonzalo Martínez 23, Julián Marinsalta 6, Santiago Pascual 0. DT: Ignacio Ferhmin.
Parciales: 9-25, 23-45 (14-20), 44-64 (21-19) 79-88 (35-24).
Árbitros: Sebastián Giannino – Jorge Scheffer – Sebastián Arcas.
Estadio: José Martínez (Villa Mitre).
Serie: 1-1.
Próximo partido: Jueves 18 de noviembre, a las 20.45, en el Hernán Sagasti.