Recién con los 2-2 simples de Matías Chaves a 8s6/10 del epílogo, se dibujó el 68-65 con el que se terminó el partido y la fase regular para Pueyrredón y Estudiantes. Con esta victoria, el auriazul automáticamente se trepó a la quinta colocación del campeonato de primera división. Desde el jueves, se enfrentará con desventaja deportiva y al mejor de cinco, al alicaído Bahiense del Norte, que acarrea seis traspiés en fila… El albo, en tanto, culminó en la octava posición y se las verá contra Liniers, el número uno.
Se trataba de la fecha final y todavía tenían cosas valiosas en juego.
Un triunfo, tanto para Estudiantes como para Pueyrredón, significaba escalar un puesto.
Lo comenzó mejor pisado el huésped, con 2+1 de Eddie Roberson más un alley-oop suyo tras pase de Gastón Rivera, disparándose a 2-8 y 7-12. De a poco, el anfitrión emparejó con Mariano Castets (8) tomando la batuta, pero con nulo acompañamiento…
Así las cosas, Purre halló dos bombas casi seguidas de Luciano Fernández y se apropió del segmento inicial por 11-15.
Para el 2ºC, Estudiantes se rehabilitó con una tempranera granada de Agustín Amore y el positivo ingreso de Jerónimo Mitoire, otorgándole la primera supremacía de la noche (16-15), en 3m45s de ese chico.
No obstante, Pueyrredón contuvo ese embate con Roberson (6) desequilibrando adentro más oportunas apariciones de José Belleggia (4), justamente un ex albo.
De esa forma, escapó a 16-25 al promediar ese período y a 21-29 con 2m11s para arribar al descanso más extenso. Un bombazo de Leonel Alemañy (24-31) intentó animar a los suyos, pero el visitante se mantuvo en su libreto y disfrutó de nueve tantos de renta, camino a los vestuarios: 24-33.
Es el segundo año que estamos trabajando en el club. En 2017, clasificamos séptimo en la última fecha y jugamos playoffs por el título, después de mucho tiempo. Estuvimos cerca de bajar a Villa Mitre. En este 2018, el objetivo fue el mismo: zafar de la permanencia. Y lo conseguimos en una situación inmejorable, debajo de los candidatos de siempre. Estamos muy contentos, pero sabiendo que podemos y que queremos más. La idea era evitar a Liniers y Villa Mitre. Bahiense es el rival que queríamos, porque la partida de Pennacchiotti lo afectó, aunque sigue siendo un buen equipo. Pero él era la vía de gol, el rebotero y generaba juego. Prepararemos la serie para ser un rival difícil. (Mauricio Vago-DT de Pueyrredón).
Al regreso, en apenas 1m21s de acción, a Pueyrredón le sancionaron tres faltas.
Aunque no hizo mella en su producción, porque comenzaron a aparecer más obreros, como Marcos Fernández (3), y sendos triples de Luchito Fernández más Roberson, pudiendo ampliar su brecha a la máxima de 35-49, después de la única conversión de Damián Foulkes y con 3m41s por consumirse de ese tercer acto.
En el dueño de casa, los que salieron a dar la cara en ese negro pasaje fueron Agustin Amore (2-3 t3, 1-2 t2 y 2-2 t1) y Catete (4).
En la primera fracción del tramo definitorio, continuó mandando a piacere Pueyrredón: hubo dos apariciones consecutivas de Rivera (45-54), simples de Matías Chaves (47-56) y jugada de doble más adicional de Marcos Fernández (52-59).
A partir de allí, Belleggia se le pegó como estampilla a Castets y sobrevinieron dos acciones de faltas mutua al producirse roces entre ellos…
A 4m05s, un triple de Alemañy mandó el mensaje: 55-59. Y, luego, asustó más aún con sendos simples del propio Leonel (57-59), a 3m46s.
Dos viajes perfectos a la línea de Chaves y Marcos Fernández, le brindaron alivio a Purre, con 2m19s en el reloj (58-63). Y el propio Chavito se encargó de mantener la distancia al embocar de dos, quedando 1m44s (60-65).
Se ingresó en el embudo final, haciéndose cargo Castets en el local (62-65) a 1m23s. Después, la perdió Rivera a 58s7 y Catete marró su intento de dos, a 46s.
El huésped malgastó su siguiente ofensiva y, posteriormente, mandó a la línea a Julián Rodríguez: aplicó 1-2 (63-65), con 16s4.
En contrapartida, Estudiantes frenó a Chaves, que también hizo 1-2 t1 a 13s5; para que en lo sucesivo Julián Rodríguez le tocara volver a ejecutar, ahora encestando ambos a 9s7: 65-66.
Con la solicitud de tiempo muerto pertinente de Vago, Pueyrredón diseñó la última para trasladarle la bola a su mejor tirador: Chaves fue cortado y a 8s6 archivó los dos libres, poniendo arriba a los suyos por 65-68.
En el ataque final, el albo se trabó con la bola y Rivera, rápido de reflejos, la extirpó para salir airoso de la acción y sentenciar el éxito auriazul.
Pueyrredón ya hace dos años que no sufre.
Anda con la cabeza en alto.
Síntesis | Primera División – Segundo Tramo – Fecha #22
Estudiantes 65: Mariano Castets 26, Leonel Alemañy 9, Nehuén Berón 3, Agustín Amore 16, David Pineda 2, (FI); Jerónimo Mitoire 4, Sebastián Cinti 0, Tomás Scarpaci 0, Valentín Duvanced 0, Bruno Ferrandi 0 y Julián Rodríguez 5. DT: Walter Romerniszyn.
Pueyrredón 68: Luciano Fernández 11, Gastón Rivera 8, Matías Chaves 15, Eddie Roberson 16, Marcos Fernández 8, (FI); Damián Foulkes 2, José Belleggia 4, Juan Ignacio Scattolini 2 y Fernando Alfonso 2. DT: Mauricio Vago.
Parciales: 11-15, 24-33 (13-18), 40-50 (16-17) y 65-68 (25-18).
Árbitros: Sebastián Arcas-Nicolás Larrasolo.
Estadio: Osvaldo Casanova (club Estudiantes).