¡Historia de América!

Bahía Basket escribió otro capítulo de oro que quedará grabado dentro de los hitos basquetbolísticos más sagrados de la ciudad. En su tercera y última presentación en Ponce (Puerto Rico), enfrentando a Hebraica Macabi (Uruguay) por el cuadrangular semifinal de la Liga de las Américas, se repuso a 21 tantos de desventaja (27-48) y triunfó: 73 a 69. Lo logró con actitud, amor propio y el desequilibrio de Lucio Redivo y Máximo Fjellerup. Así, obtuvo al pasaje al Final Four, donde el viernes 17 se medirá ante Fuerza Regia (México). El otro cruce será Guaros de Lara (Venezuela)-Leones (Puerto Rico).

El inconexo inicio del pleito, el 0-20 en triples, el endiablado Leandro García Morales, los 21 tantos de desventaja, la resurrección de Lucio Redivo, el talento y lágrimas de Máximo Fjellerup y la hazaña de revertirlo para colarse entre los cuatro mejores elencos americanos…

Parece un hermoso guión de película. Aunque, no.

Lo narrado fue bien real y ocurrió anoche, en Ponce, cuando Bahía Basket pasó de terapia intensiva a saltar de euforia, después de concretar una recuperación de ensueño y de ser protagonista de otro hito en su corta existencia institucional.

Respiremos. Y vayamos cronológicamente.

El amanecer fue poco vistoso, aunque nuestro representativo se puso al frente por 10-8 restando 2m36s para el cierre del 1ºC y con doble de Jamaal Levy. Luego, el amo y señor de las acciones resultó García Morales, mediante quien Hebraica revirtió el trámite para adueñarse del primer chico (16-14). Siempre, claro, con Luciano Parodi siendo la sombra de Lucio Redivo (2 pts)…

En las postrimerías de ese lapso y añadiendo los primeros pasajes del 2ºC, a Bahía le costó horrores encestar. En total, fueron apenas 2 unidades en 8 minutos, algo que el auriazul usufructuó con la dupla García Morales-Parodi, incorporando a Jaime Lloreda y Martín Aguilera, para distanciarse por 33-20 (racha de 12-0) con 1m22s para el ET.

Para colmo, García Morales abrochó la etapa con jugada de 2+1 que le dio 14 de renta a Macabi (36-22) y hundió más aún el ánimo albiceleste, que desde lejos no veía: 0-18 en triples, con 0-4 Corvalán y Levy, 0-3 Fiellerup y Redivo y 0-2 Ramos y Vaulet.

Alta preocupación.

Si bien en 2m58s del complemento llegó el «bendito» triple bahiense (Levy), la tónica se mantuvo: Hebraica dominó a voluntad, García Morales siguió castigando y en una cachetada de Izaguirre, los uruguayos abrazaron su máxima de 48-27, a 4m50s de cerrarse el 3ºC.

El panorama era sombrío. No había reacción bahiense, ni imaginación y a Redivo lo tenían maniatado.

Sin embargo, lentamente, Bahía dio signos de recuperación: Johnson la volcó y Ramos añadió otra bomba (52-40), más allá de penar en el global desde la línea de libres y de que Hebraica ingresó al segmento final 13 arriba: 56-43.

No importó.

Porque Súper Redivo volvió a calzarse la capa y comenzó a quitarse la mufa que lo tuvo a maltraer: primer triplazo en 2m19s, segundo en 3m18s, tercero en  4m27s y cuarto en 5m26s.

Conclusión: 61-57. Inicio del milagro.

Es más, en la acción siguiente Fjellerup clavó la lujosa bandeja y colocó a Bahía ahí (61-59), con 4m00s por delante.

Si bien Higgs surgió con un triple que pareció tranquilizador para Hebraica (64-59), Bahía ya tenía otro semblante, era consciente de sus posibilidades, creyó que podía, estuvo confiado y en positivo.

Así las cosas, Juampi Vaulet lo empardó con un 2+1 (64-64) a 2m31s, Fjellerup le dio la ventaja a los suyos a 1m39s (64-66) y a Higgs se le escapó la pelota a 1m28s del epílogo. No obstante, cuando Fjellerup subía la bola pasando mitad de campo, cayó al piso, la perdió y con una bandeja García Morales igualó en 66, a 1m18s.

Rápidamente, el tresarroyense se redimió con un triplazo vital a 1m02s (66-69), Hebraica desperdició su avance y Bahía lo imitó, aunque recuperó la posesión con 35s en el reloj. A 18s8/10, cortaron a Vaulet, quien marró ambos…

Igual, en la reposición, Hebraica se encegueció y la pelota se fue afuera. Bahía repuso a 16s4/10 y la víctima de falta fue Redivo, encestando ambos (66-71) a 12s2/10.

En su desesperada respuesta, Hebraica sacó de la galera un tiro de 6m75 poco ortodoxo de Higgs a 3s9/10, colocándole dramatismo a la definición (69-71).

De todas maneras, enseguida el balón le llegó al súper héroe Redivo, lo frenaron, embocó ambos y firmó la participación de Bahía Basket en el Final Four de la Liga de las Américas.

Algo que ya es historia. Pero también real.

Y… ¿Por qué no soñar en la conquista de América?

Síntesis | LDA – Semifinales – Juego #3

Hebraica Macabi (69): Luciano Parodi 13, Leandro García Morales 26, Michael Hicks 11, José Lloreda 6, Sebastián Izaguirre 5, (FI), Omar Cantón 2, Salvador Zanotta 2, Martín Aguilera 2 y Jimmy Boston 2. DT: Leonardo Zylbersztein.

Bahía Basket (73): Facundo Corvalán 5, Lucio Redivo 26, Juan Pablo Vaulet 13, Jamaal Levy 7, Anthony Johnson 10, (FI); Máximo Fjellerup 9, Jared Blocker 0, Hernán Jasen 0, Ariel Ramos 3 y Martín Fernández 0 DT: S. Ginóbili.

Parciales: 16-14, 36-22, 56-43 y 69-73.

Árbitros: Roberto Vázquez (PR), Michael Weiland (CAN) y Omar Mariscal (MEX).

Estadio: Pachín Vicéns (Ponce, Puerto Rico).

¡@bahiabasket ?? al #Final4 de la #LDA2017! ¡Entre los mejores 4 de América ?! pic.twitter.com/QEfa0UpxKB

— Liga de las Américas (@Ligamericas) 5 de marzo de 2017

Fotos: FIBA Américas.