Gimnasia hizo lo que debía hacer: ganó y puso la serie ante Olimpo 2 a 1. Fue un triunfo absolutamente justo, pero trabajado y con altas dosis de emoción. El 84 a 76 marcó otro quiebre en este enfrentamiento y dejó al Lobo a un sólo paso de pasar a los Cuartos de Final. El juego clave y decisivo será ahora este viernes, desde las 21.30 horas, otra vez en el Polideportivo. De ganar el Lobo, pasará a los Cuartos de Final donde lo espera el número 1 de la Fase Regular, Deportivo Viedma. Caso contrario, habrá quinto en Bahía.
El primer parcial marcó un claro predominio de Gimnasia. Y fue a partir de una defensa muy dura sobre cualquier opción ofensiva de Olimpo y de una selección de lanzamientos que lo puso en ventaja desde el mismo salto inicial. Para ello fue clave todo lo que hizo Joe Efese, de un cuarto impresionante. El extranjero de Gimnasia hizo de todo y todo lo hizo bien. Terminó con 11 puntos y 7 rebotes, un repertorio que incluyó un volcadón en contragolpe y hasta un triple larguísimo que levantó a todo el Polideportivo.
Pero si hay que destacar algo de ese parcial, fue que el Lobo encontró soluciones siempre. Y hasta cuando apareció trabado en ataque, una individualidad salió al rescate. Y la defensa terminó de acomodar todo. La ventaja de 12 al finalizar el cuarto (25-13) mostraba exactamente la distancia entre uno y otro.
Lejos de cambiar algo en el arranque del segundo, Gimnasia endureció su defensa y logró correr en contragolpe. Y así llegó a la máxima de 17 a favor. Ya descansaba La Bella y el equipo no bajaba la intensidad. Pero los Playoffs tienen condimentos especiales y un par de distracciones defensivas, más una clara levantada ofensiva de Olimpo llevó las cosas a un marco de paridad del que Gimnasia no se supo desembarazar. Y así la diferencia se evaporó casi por completo. Fue clave para esto la defensa zonal de Olimpo que confundió al local. Pero un triple de Segón apagó la sequía ofensiva, Rusconi metió un doble con falta y ya la historia volvió a ser como había sido como casi a lo largo de todo el desarrollo. El 49-38 final marcó la superioridad de uno y otro más allá de las rachas y baches propios de los juegos de esta característica.
El tercer cuarto tuvo todo lo que tiene que tener este tipo de partido. Roces, juego, cruces entre hinchas, fallos polémicos y mucha intensidad en el rectángulo de juego. Y en ese clima enrarecido, paradójicamente, salió favorecida la visita que a la hora de jugar era mucho menos que el local y encontró el río revuelto en su propia ganancia. El clima picante desordenó a Gimnasia y potenció a Olimpo. Y estabilizó la diferencia en una decena de puntos cuando estaba todo dado para que el Lobo liquidara el pleito. Los bahienses, por el contrario, se entonaron. Fue 65-53 ese parcial para el Lobo que supo cerrarlo mejor.
Pero el arranque del último chico mostró lo mejor de Olimpo. Que puso todo lo que tenía sobre el parquet, contó con un Summers incontrolable en ese período y aprovechó a fondo un par de indecisiones de Gimnasia que, por primera vez en el juego, mostró algún signo de debilidad.
Y la diferencia se fue achicando cada vez más hasta que a falta de 5.33 llegó a ser sólo de 3. Y ahí el partido se abrió para los dos equipos, Los de Bahía forzaron una y otra vez y lograron frenar el andar aceitado del local que los había superado claramente hasta entonces. Y tuvo tres ataques la visita para empatar el juego. Pero una tapa impresionante de Efese derivó en una volcada de Rosende en la contra y otra gran defensa Tripera terminó en una bandeja de La Bella.
La distancia se fue a 10 y se empezó a definir todo. Ya Gimnasia encontró otra vez el dominio del juego, apareció Rosende aportando elementos claves en todos los aspectos del juego y la historia quedó sentenciada. Fue 84-76 y este viernes puede liquidar la serie. Será local otra vez en un Polideportivo como en sus mejores noches y si juega con la inteligencia y determinación de este tercer partido, tendrá pasaje a los Cuartos de Final asegurado.
Informe: Prensa Gimnasia.